El PRI no las trae todas consigo y está a punto de cambiar presidente del partido por dos razones: porque se investigan en la Fiscalía General de la República algunos abusos de Enrique Peña Nieto y porque el equipo cercano del ex mandatario le hizo a Alejandro Moreno una grosería como no la había recibido ningún presidente del partidazo.
Me explico: ayer el ex secretario de Gobernación de Enrique Peña Nieto, el actual coordinador de la bancada senatorial priista Miguel Ángel Osorio Chong dejó solo, le hizo el vacío, a Alejandro Moreno, presidente del PRI y se aventó darle la desairada de su vida. Chong decidió abortar la sesión plenaria de Senadores del PRI porque el tal Alito Cárdenas quiso pasarse de listo y entrar a fuerzas al recinto legislativo.
Joaquín López Dóriga, en Milenio, en su columna diaria en su segundo segmento de Retales lo cuenta así: “2. IRRUPCIÓN. Alejandro Moreno irrumpió sin estar invitado (sic) en la plenaria de los senadores del PRI y Miguel Osorio la suspendió y reiteró su rechazo al presidente del PRI y a su proyecto de seguir al frente del partido y que se irá en agosto”.
Sopas. Alito se va en agosto -dice López Dóriga- pero el PRI debe respaldar antes en el Senado la ley electoral o Peña Nieto la pagará con cárcel.
¡Ah! Alejandra del Moral perderá la elección en el Edomex. El PRI ya marchó.
Al tiempo.
Lío: Peña Nieto es investigado, Alito Moreno abortó plenaria del PRI y Morena goza

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